lunes, 6 de diciembre de 2010

¡Estado de alarma!



Ni el plante de los controladores aéreos ni la solución del Gobierno me ha llamado la atención. Lo primero porque era un problema que en verano se dejó pasar (más o menos) y lo segundo porque es una solución fácil.

Ya en el mes de Julio, cuando los huelguistas del Metro de Madrid pusieron en jaque a toda una ciudad, la Presidenta Esperanza Aguirre avisó y advirtió de que aquello era una huelga política en la que el colectivo pretendía el desgaste de su Gobierno. Pues bien, en aquel momento la Sra. Aguirre alzó la voz para predecir que ocurrirían más actos como aquel, por la benevolencia e indulgencia con los sindicatos y otras agrupaciones de trabajadores.

En mi opinión el derecho a huelga debe ser revisado y regulado de una vez por todas. No puede ser que la sociedad esté a las órdenes de grupos tan reducidos como pueden ser los controladores aéreos, los responsables del metro, etc. El poder legislativo está para solucionar estos problemas, y creo que sería un acto de responsabilidad, y también un gran alivio, el acabar con situaciones tan angustiosas como las que se han vivido en este puente.

En cuanto a la solución que ha adoptado el Gobierno en referencia al problema de los aeropuertos, creo que ha sido acertada pues para eso existe el Estado de alarma en la Constitución. De todas formas creo que en estos meses (desde verano) ha habido demasiada relajación por parte del Ejecutivo, y eso se ha pagado a las primeras de cambio. Y es que aunque haya sido una buena solución, no deja de ser algo a corto plazo y a última hora. No nos podemos permitirnos el ir adoptando decisiones tan improvisadas y a medida que van transcurriendo los acontecimientos. Todo son muestras de lo cortoplacista que es nuestro Presidente del Gobierno, un improvisador nato que lleva el buque España a una deriva sin freno.

Por último quiero hacer referencia a la importancia del sector militar en un país. Pues a la vista está que en los momentos más complicados se acaba necesitando la intervención de aquellos que de verdad sienten la importancia de la estabilidad nacional, aquellos que valoran el formar parte de una nación única y verdadera.

miércoles, 1 de diciembre de 2010

Ocultismo Separatista



Antes de nada, quiero felicitar a Alicia Sánchez Camacho y a todos los votantes y simpatizantes del Partido Popular. El resultado del domingo fue un logro histórico que tiene mucho mérito, como luego explicaré.

Analizando lo sucedido el fin de semana pasado, se nos plantea un escenario bastante claro, pues hay un nacionalismo catalán supuestamente victorioso y muy crecido, después de haber obtenido un resultado electoral, digamos que correcto y moderado. Y lo digo porque ni han sido los 70 escaños del Sr. Pujol ni creo que haya habido un vencedor claro (moralmente hablando), pues lo que creo que ha abundado más han sido los vencidos. Unos derrotados que van desde la izquierda socialista española (con representación de un cordobés) hasta los separatistas de Esquerra Republicana.

La dificultad, a la que hacía referencia antes, respecto al PP de Cataluña, es consecuencia de que hay otro partido que dice ser de Centro-Derecha (CiU) que ha planteado medidas económicas que en la teoría se parecen a las propuestas por el Partido Popular. Han utilizado un “manto” económico para ocultar sus verdaderas prioridades.

Al nacionalismo catalán, como a las demás concepciones aberrantes del Estado, lo único que le ha preocupado, preocupa y preocupará en el futuro es algo tan distorsionado, egoísta y aprovechado como son los referéndums independentistas.

Convergencia y Unión ha recibido muchísimos votos de habituales votantes del Partido Popular, que han visto un voto más “útil” en la federación catalana. Se han dejado cegar por un discurso pseudomoderado y ocultista, que ha hecho creer al pueblo que su prioridad es la crisis. Y nada más lejos de la realidad, pues la verdadera y única prioridad del señor Arturo Mas es la de cualquier separatista anticonstitucional: La desmembración del Estado español, democráticamente autodeterminado y constitucionalmente establecido y aceptado por el conjunto del pueblo soberano.

Si tuviera que señalar con el dedo y decir los que a mi parecer son los verdaderos teatreros del alocado panorama político catalán, sin ninguna duda diría los dirigentes de CiU (no sus votantes), que han escondido su verdadero deseo para Cataluña. Es indignante que escondan sus ideales independentistas detrás de un nacionalismo rancio que sin pena ni gloria ha pasado por el Parlament estos 7 años de socialismo.

Es por todo esto que mi preocupación ha aumentado después de estas elecciones, pues el independentismo “valiente” (por muy en desacuerdo que esté yo con sus ideales antinaturales) ha caído de 21 escaños a 14 (ERC+SI). Esto es bastante, si no fuera porque el separatismo enmascarado ha obtenido 62 escaños.

No presagio una estabilidad en Cataluña los próximos años, pues las discrepancias surgirán de base, como resultado de las diferencias entre lo que muchos piensan haber votado y lo que realmente llevará a cabo el President Mas.

sábado, 2 de octubre de 2010

Cimientos de la sociedad (II): La Libertad


¿Qué sería de una sociedad sin libertad? Supongo que el resultado sería una farsa. Una falsedad de sistema que todavía existe en muchos lugares del mundo. Países donde al ser humano se le oprime con el objetivo de conseguir reducir a añicos su libertad de acción y lo que es peor: su libertad de pensamiento.

En una entrada anterior (In veritate libertas) hablé de los elementos contemporáneos que sometían a la voluntad del ser humano, hasta convertirlo en un simple ser vivo que se paseaba por el mundo, es decir, un simple animal. En esta entrada quiero desviarme de esa crítica (Que sigo manteniendo) para hablar sobre la falta de libertad (Véase política) o su mala gestión, cuando el ente político la da en cantidades excesivas y nocivas.

Hace poco vi una entrevista al Presidente socialista Hugo Chávez por parte de la cadena británica BBC. En ella, el periodista se mostraba muy crítico con el sistema pseudodemócrata de la República de Venezuela y criticaba algunos actos despóticos que han podido llegar a vulnerar derechos fundamentales de las personas como son el libre pensamiento, la libertad política… El Sr. Chávez se dedica exclusivamente a desviar el tema de las encarcelaciones a opositores al Gobierno Bolivariano de pacotilla que tiene montado. Esto es un ejemplo de ese tipo de personas que se creen sus propias mentiras, y les da igual exponer su farsa política ante un periodista británico o delante de la Asamblea General de las Naciones Unidas. Su llamada “Revolución socialista” es un atentado contra la libertad del ser humano, de la misma forma que también lo es el Régimen comunista de Fidel Castro. Un poder establecido (Aunque en decadencia) que lleva oprimiendo demasiado tiempo al pueblo cubano. Y otros muchos ejemplos de parecida índole: Corea del Norte, Mundo islámico radical, China…

Todos ellos configuran una situación dramática que no puede pasar desapercibida para las fuerzas occidentales. Estados Unidos, Europa y otros países con claras convicciones democráticas deberían acabar por la vía diplomática o por la fuerza con esos regímenes donde se viola la libertad del ser humano. Y no hay que temer a una “misión” si con ella se consigue la paz definitiva.

"Tras la guerra viene la paz. ¿Y qué es la paz? La paz es algo muy relacionado con la guerra. ¡La paz es consecuencia de la victoria!" San Josemaría Escrivá de Balaguer

Todo lo que he mencionado es en relación a la falta de libertad. Y qué sucede cuando es todo lo contrario. Si la falta de libertad es mala, ¿también lo es el exceso? ¡Por supuesto! Y más peligroso puede llegar a ser. Ya que cuando nos falta algo siempre nos damos cuenta, pero no sucede lo mismo cuando de algo tenemos cantidades sobrantes.

El peligro de ese exceso lo veo en la mala gestión de la libertad actual. Nos han dado demasiada rienda suelta y ahora no hay quien controle según qué situaciones. Y para ejemplo, sólo hay que ver lo que sucedió el miércoles pasado con la Huelga General con los Antisistemas.

No se le puede conceder, desde el poder ejecutivo, esa libertad indecente a esta sociedad. Pues con la carencia de responsabilidad y de valores que exhibe, lo único que puede resultar es un carnaval continuo y perpetuo. Un descontrol que como en muchas ocasiones he indicado sólo tiene un nombre posible: Libertinaje.

Tanto la falta como el exceso de libertad hacen del ser humano un esclavo de su propia sociedad. Víctima de un sistema político injusto o de un mundo contemporáneo cortoplacista y libertino.

sábado, 24 de julio de 2010

"Aún tenemos patria, ciudadanos".



Tiempo nos ha costado construir un sentimiento nacional, y todavía más tiempo hemos tardado en lucir sin ningún tipo de complejo las enseñas nacionales. El temor y la vergüenza han dado paso al orgullo por “la Rojigualda”, la bandera que representó, representa y representará a todos.

Son muy curiosas las situaciones en las que los contrarios al fútbol o a la Patria menosprecian la victoria de nuestra Selección, en el pasado Mundial de Sudáfrica. Califican el sentimiento nacional de excesivo, infundado e inapropiado. ¡Qué osados! Tal es la magnitud del acontecimiento, tan enorme es la envergadura de la victoria que ha sido capaz de silenciar, enmudecer y aplacar a la marea separatista.

La manifestación tripolar en defensa del totalitarismo catalán tenía un objetivo claro: acabar con la democracia, eliminar la voz del soberano pueblo español representada en la Constitución española. Los deseos interesados y descoordinados de las diferentes ramas del separatismo actuaron (por suerte) como elemento autodestructor.

Los ánimos están caldeados y no es para menos. El “tinglado” que hay montado en Cataluña empieza a no tener sentido, ya que muchos se preguntan si es necesario inventarse una nación catalana, al gusto y placer de 3 ó 4 iluminados. Cataluña depende de España, como el impúber de su madre. ¿Desavenencias entre regiones? Bueno…no todos los hermanos se tratan igual. Estoy mucho más aliviado que hace 2 meses. He podido comprobar que una empresa nacional como la conquista del Mundial de fútbol ha resultado ser el mejor escenario para que el cuerdo pueblo español se uniera con ese objetivo unidireccional.

La crisis económica pasó desapercibida por unos días, y es que la exaltación social superó a la podredumbre económica impuesta por el socialismo. Las razones las encontramos en lo que ya he dicho muchas veces: el problema es social no económico. La situación financiera y económica no es más que la careta con la que se nos presenta el mal social e inmoral que domina y somete al mundo contemporáneo.

Pongamos en marcha soluciones acordes con la razón y la naturaleza de la humanidad. Que el legislador y ejecutivo tengan en cuenta la moral, en los momentos de dirigir los pasos de la Nación española, pues en caso contrario no se atisba un futuro muy esperanzador. Esas decisiones basadas en la razón y la moral son las que harán de la Patria, un instrumento para facilitar la respuesta a la llamada universal a la que todos los ciudadanos somos llamados.

"España, evangelizadora de la mitad del orbe; España martillo de herejes, luz de Trento, espada de Roma, cuna de San Ignacio...; ésa es nuestra grandeza y nuestra unidad; no tenemos otra. El día en que acabe de perderse, España volverá al cantonalismo de los arévacos y de los vectores o de los reyes de taifas."
Marcelino Menéndez Pelayo

lunes, 3 de mayo de 2010

Fides est Patria




Últimamente me viene a la cabeza la típica imagen “peliculera” del abuelo sentado en su silla mecedora junto a su nieto, el cual le escucha sentado a su lado. Y el abuelo le dice: “Cuando yo tenía tu edad esta tierra era una y no cincuenta y una. Teníamos nuestros problemas como todos, pero la fuerza de la unidad nacional nos levantaba en los momentos más duros.”

No es descabellado pensar que esa situación se pueda llegar a producir en un futuro no muy lejano. Pues a la vista está que muchas personas y colectivos sociales, de ciertas partes del territorio nacional, disfrutan hablando en nombre de Euskadi, de Cataluña, de Galicia…

La situación es preocupante. Hace poco escuchaba que en Francia se ilegaliza cualquier partido político que tenga como objetivo crear identidades nacionales paralelas a la República francesa o que pretendan directamente la independencia de algún territorio francés. Y es que los vecinos del Norte tendrán muchas cosas, pero la idea de Nación la mantienen mejor que nadie. Y lo mejor no es que lo piensen, lo mejor es que lo corroboran a la hora de legislar o hacer cumplir la legislación vigente.

En España debemos empezar a hacer cumplir la Constitución sin ningún tipo de restricción, sin libres interpretaciones de la “Carta Magna”, sin faltas de respeto hacia la “Ley de leyes”, sin excepciones…

La cantidad de estatutos que se están creando recientemente, lo único que hacen es desestabilizar el orden constitucional establecido desde 1978. Esas leyes estatutarias son semilleros de rivalidades, envidias y rencores entre los diferentes territorios del Estado español. Fuentes de controversia que no ayudan en absoluto al establecimiento de una paz nacional anhelada desde el 23 de febrero de 1981.

Hay personas que pretenden disponer de la Patria con amputaciones y mutilaciones creyendo que ésta pertenece a su patrimonio, y por lo tanto piensan que la Patria es algo contractual y negociable, algo que puede ser divisible. Aquellos que sostienen tales teorías actúan “contra natura”. La Patria como “todo social continuo” no entiende de tratamientos jurídicos ordinarios, pues nosotros no tenemos una Patria; pertenecemos a ella y por consiguiente no podemos alterarla, pues es un ente superior a cuales quieran que sean nuestros burdos instrumentos jurídicos.

La filiación y la nacionalidad nos vienen dadas por naturaleza, no hay elección posible ante tal designio. Es imposible crear falsos entes nacionales e ilusorias atribuciones estatales, pues la consanguinidad nos determina imperiosamente. De nada sirven las palabras y quimeras creativas en relación a las regiones del Estado español.

Peligrosos son los caminos que está tomando la Democracia en su relación con la libertad. Esperemos que sus caprichosos deseos no la conviertan en compañera del libertinaje.

jueves, 29 de abril de 2010

De fuera vendrán y de tu casa te echarán



Curioso el “caso” Najwa, muy curioso. En las últimas semanas se ha levantado un gran revuelo por algo que no debería ser tan alarmante como es la prohibición del “hiyab”. Una prohibición totalmente legítima pues los centros educativos públicos se rigen “a grosso modo” por sus reglamentos internos. ¿Qué hay de malo en cumplir la Ley?

La Comunidad de Madrid y su Presidenta Esperanza Aguirre han actuado de forma ejemplar. Han dado rienda suelta al sentido común en medio de las continuas presiones y delirios de la mayoría de medios de comunicación. Unos medios de comunicación que parecen pretender entrar en la lucha por el Premio Nobel de la hipocresía. La prensa más desviada de la derecha ha encontrado en este “caso” un motivo de lucha a favor de los derechos de la libertad religiosa (muy paradójico). Y contrariedades vemos, ya que la campaña de los periódicos EL PAÍS y Público es de órdago, pero por suerte su “respeto” hacia las tradiciones católicas de España hace tiempo que ya no sorprende a la masa popular.

Dejando de lado la legitimidad de la actuación del centro educativo IES de Pozuelo, quiero dar mi opinión sobre esta extraña situación en la que constantemente se juzga con indulgencia todo aquello relacionado con el Islam.

Me pregunto por qué se piden retiradas de crucifijos en centro educativos por motivos de estricta lectura de la Constitución donde se remarca que nuestro Estado es aconfesional. Me pregunto por qué no interpretamos un poco mejor el artículo 16.3 de nuestra “Ley de leyes”. ¿Qué hay de esa especial mención a la Iglesia católica? ¿Podemos igualar el trato e importancia de la Iglesia de Roma con las demás? Dejándome llevar por mi “seny” la verdad es que me cuesta pensar que deba existir un trato igualitario en este caso.

NO podemos pretender eliminar aquello que forma parte de España, de su identidad nacional, de su historia y en consecuencia de su tradición. El arraigo de la tradición católica (guste o no) tiene un peso importante en nuestro país, pues aunque se crea o no en dicha doctrina, la aportación sociocultural es incalculable.

¡PERO! Hay algo que hace de ancla en ese objetivo de conservar la tradición nacional. Un motivo ya citado en mi anterior texto, un motivo que actúa cual caudillo intransigente. Éste es el MIEDO. El temor de los socialistas a actuar contra lo que viene siendo, desde la caída de Roma, un dolor de muelas para la libertad del ser humano: El Islam radical.

Muchos no se atreven a parar al Islam y toda su retahíla de tradiciones discriminatorias y nocivas que lleva consigo. Una religión que en su “Libro Sagrado” da nociones básicas sobre cómo maltratar a la mujer en caso de desobediencia, de imponer una relación amo-esclava entre cónyuges, de conquista de territorios con espadas en mano bajo el manto de la religión todavía en el siglo XXI…

Sinceramente abogo por la acción contra aquellos que pretenden eliminar nuestra identidad como nación y además instaurar un radicalismo religioso donde el miedo es quien rige todo. Defiendo las políticas que ensalcen el valor de aquello que representa España y el conjunto de sus tradiciones. Se debe actuar en contra de aquellos que intentan una sustitución pacífica de aquello que entendemos como país. Creo que es posible redireccionar la situación permisiva que estamos viviendo con el mundo islámico más radical, y en caso de que no sea así…2012 no está tan lejos.

lunes, 5 de abril de 2010

Cimientos de la sociedad (I): La educación


La sociedad actual tiene grandes deficiencias, grandes déficits que pueden parecer irreversibles, pero no lo son o no deberían serlo. Todavía estamos a tiempo de corregir serios problemas surgidos a raíz de errores cometidos tanto en la época de F.González (1982-1996) como en la de JL.R.Zapatero (2004-¿?).

¿Qué problemas son los que nos encontramos? ¿Quiénes son esos malhechores que pretenden acabar con las bases de la educación? La verdad es que es muy sencillo percatarse de esas molestias nacionales (No somos pocos los que las sentimos). Desde una calidad educativa bajísima en comparación con el resto de Europa Occidental hasta la falta de motivación del alumno…

A mi parecer, hay una gran diferencia entre la antigua enseñanza y la actual. Y se fundamenta en: la pérdida de autoridad del profesor. Hoy en día el profesor no tiene el apoyo institucional suficiente como para establecer el orden y el respeto en las aulas. Cómo va a poder dar clase un profesor si es incapaz (por asuntos ajenos a él) de establecer un orden en su correspondiente clase. El problema de la motivación del alumno puede venir por esa falta de autoridad y en consecuencia, falta de exigencia.

La motivación es el elemento motriz más importante del estudiante. Es aquel elemento que le permite autodesarrollarse y decirse a sí mismo que puede alcanzar cualquier meta. Y esa motivación le debe llegar de muchas partes. Como son el centro educativo, el entorno de amistades, el ambiente del aula, el ambiente familiar, etc.

Como apoyo al desarrollo educativo es también importante que los “instrumentos de estudio” sean sanos, limpios y morales. Puede parecer que sea algo muy abstracto el denominarlos así, pero son sabias palabras pronunciadas por alguien que sabía muy bien lo que se debía hacer.

Es por lo tanto importante, que vuelva la moralidad y la disciplina a las aulas. Que vuelva el sentido común enaltecido por la más justa de las jerarquías. Aquella que sabe distinguir entre maestro y alumno.

¡Empezamos!


“Absit” nace con el objetivo de crear debate, intercambio de opiniones sobre diferentes temas de interés. Sembrar la semilla de la discusión y el enfrentamiento no estará en la lista de objetivos a conseguir. Se tratará de respetar todos los puntos de vista y en ningún caso serán censuradas las opiniones de aquellos que colaboren en el Blog… por muy divergentes que sean. El único motivo de censura podrían ser actitudes que pusieran en entredicho el respeto hacia la diversidad de opinión.