sábado, 28 de abril de 2012

Racionalizar el modelo de Estado


Más tarde o más temprano tenía que escribir una entrada en este Blog haciendo referencia a un tema tan candente como es el de la organización territorial de nuestro Estado y Nación. Si he escogido este momento es porque creo que ahora más que nunca es importante plantearse cambios de esta dimensión que afectarían favorablemente a España en todos los sentidos.

Hoy en día es insostenible un Estado con 17 administración propias, con parlamentos, con diputaciones, delegaciones comarcales, exceso de Ayuntamientos… Hay una cantidad indecente de duplicidades y cargos administrativos sin sentido en cada una de las Comunidades Autónomas (sin olvidarse de las ciudades autónomas). Son muchos los expertos y personalidades que han puesto en duda nuestro sistema, y ya son los organismos internacionales los que aconsejan correctamente para que España cambie su actual realidad autonómica para dar paso a un país más racional y equilibrado en su gestión y administración. Hemos llegado a un punto en el que el problema ya no es sólo el exceso de administraciones, también lo son el exceso de visiones políticas e intereses particulares diversos que suponen piedras en el caminar de nuestra nación hacia el bienestar social. Tenemos en nuestro país algunos ejemplos de administraciones reducidas que nunca han supuesto ninguna problemática como la actual.

Como ejemplo está la organización militar del Estado en regiones militares (Considero que es una estructura que se tendría que valorar muy seriamente e intentar imitar). El número de administraciones por debajo de la Estatal debería ser de un máximo de 8, tal y como se ve claramente que es posible. Soy consciente que hay regiones en España con una historia más marcada que otras y es por eso que también hay que tener una consideración histórica hacia ellas pues así lo reclama el sentir general de la Nación. Ahora bien, el Estado no se puede permitir la actual estructura territorial y administrativa por el simple hecho de que cada región pretende gestionarse a sí misma de forma apartada del conjunto del pueblo español.

Es necesario un gran cambio constitucional en ese sentido para poder dar viabilidad económica y jurídica a nuestra Nación española. La actualidad del mundo requiere, como ya he dicho en diversas ocasiones, de Estados con estructuras firmes y rígidas, con instituciones sólidas que no puedan ser cuestionadas por agentes externos. El conjunto del pueblo español tiene que estar preparado para reformar la visión y realidad presente sobre el Estado para evitar cualquier tipo de resquebrajamiento por culpa de la situación económica, política y social actual.

No veo por qué hay que darle dramatismo a una situación que sólo nos puede beneficiar y que no debe suponer un drama psicológico para nadie pues hay muchas Comunidades Autónomas que lo son desde hace muy poco tiempo.Es nuestra obligación plantearnos el cambio, estudiarlo y llevarlo a cabo.