viernes, 4 de mayo de 2012

NO a la cultura de la Subvención

 (Publicado el 4 de mayo de 2012 en el DIARI SANT CUGAT)


Desde que el Partido Popular ha llegado al Gobierno de España se acabó la fiesta y el país entero ha de apretarse el cinturón, ya que así lo requiere la delicada situación económica. En tiempos como los que estamos viviendo hay que tomar medidas drásticas y yo soy de los que piensa como la Presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, a la hora de aconsejar retirar por completo las subvenciones a partidos políticos, patronal y sindicatos (entre otros). Siempre he sido contrario a la "subvención" por considerarla perjudicial para las arcas del Estado y por ser perjudicial para quien la recibe pues tiene el riesgo de caer en la relajación o puede tender a pensar que "papá Estado" siempre le sacará las castañas del fuego, por lo que no creo que sea la mejor manera de incentivar la creatividad, el emprendimiento y el crecimiento económico. Además de las subvenciones que he citado habría que añadir las de ámbito autonómico y local, ya que hay demasiados entidades que viven de las arcas públicas con la excusa de perseguir fines culturales y sociales, cuando en realidad es bien sabido que sólo tienen como objetivo el adoctrinamiento ideológico. Parece ser que en Cataluña y Sant Cugat hay algunos que siempre están a salvo de la crisis...

Tiempo de valientes

(Publicado el 30 de marzo de 2012 en el DIARIO SANT CUGAT) 


Un eslogan muy utilizado en las Escuelas de Negocios de todo el mundo es el de "Las crisis pueden ser épocas de oportunidades". La frase puede sonar insensible, despreocupada y poco solidaria con las personas que ahora mismo lo están pasando francamente mal por la situación de crisis global (especialmente acentuada en nuestro país) pero no lo es. Ahora tenemos la oportunidad de llevar a cabo reformas de dimensiones importantes en todos los ámbitos, entre las que destaca la justa y necesaria reforma laboral. Un Real Decreto Ley que acabará con nuestra obsoleta legislación laboral que tanto merma nuestras opciones de recuperar la salud de la economía de España. El fortalecimiento del papel del emprendedor, facilitar la movilidad laboral y la formación profesional, la creación de un nuevo contrato para pymes con más de 50 trabajadores, el ataque frontal a la economía sumergida y el absentismo laboral, la flexibilidad interna, priorizar el convenio de la empresa por encima del sectorial... Estos son algunos de los puntos básicos de esta reforma laboral tan criticada por la izquierda más descarada de nuestro Estado. Digan lo que digan, yo estoy totalmente convencido de que el tiempo dará la razón al Presidente Mariano Rajoy y al Gobierno de España.

Verdaderos demócratas

(Publicado el 24 de febrero de 2012 en el DIARI SANT CUGAT)


Aprovecho la oportunidad que tengo de escribir esta columna de opinión para condenar de manera rotunda los actos vandálicos de la noche del martes 21 de febrero contra la sede del Partido Popular de Sant Cugat por parte de unas 40 personas. No puedo ocultar que me resulta curioso comprobar como aquellos que piden justicia son los que se convierten a las primeras de cambio en verdugos de la libertad de pensamiento y expresión, los que intentan callar a los que no piensan como ellos por medio de la violencia y la intimidación, los que lanzan piedras contra nuestras sedes, los que acuden al insulto y la provocación cuando algo no les gusta. Nosotros no somos como ellos y procuramos tener siempre la mano tendida para dialogar y caminar hacia una convivencia cada vez más cívica. Nos consideramos verdaderos defensores de la democracia, abogados de la libertad del individuo siempre que ésta no vaya en contra del Estado social y democrático de Derecho. Defendemos nuestras posturas ideológicas con respeto y de acuerdo con el ordenamiento jurídico vigente, ya que cuando estamos en desacuerdo con posturas diferentes a las nuestras, hacemos uso del sistema democrático para intentar hacer valer aquello en lo que creemos por el bien común. Somos el Partido Popular y nos sentimos orgullosos de ser verdaderos demócratas.